La diversión y la adrenalina explotan en este Parque Natural Recreativo donde un grupo de instructores desarrollan las más diversas y entretenidas actividades destinadas a todas las edades.
En un atractivo marco de vegetación obereña, los desafíos van desde volar entre los árboles utilizando un péndulo de más de 20 metros de largo; hamacarse sobre una laguna corriendo el riesgo de terminar zambullidos en ella; atravesar la selva en una intensa práctica de tirolesa; cruzar puentes colgantes; realizar paseos por senderos recónditos; y mucho más.
Se trata de un alucinante espacio dónde disfrutar de una jornada cargada de actividad física y sensaciones incomparables.
(Calle Guayaba s/n).